Proyecto de BRP (Batey Rehab Project)
LA HISTORIA DE BRP
En 2009, la fundadora y directora ejecutiva de BRP viajó a la República Dominicana por primera vez para comenzar a trabajar en su proyecto de tesis de maestría en arquitectura. Mientras realizaba su tesis, comenzó a darse cuenta de cuánta ayuda faltaba en el sector de la vivienda. ¿Cómo podrían las personas construir más rápido, de manera asequible y sostenible? Aquí es donde se sentaron las bases de BRP.
En 2013, se fundó BRP, y rápidamente se dieron cuenta de que estaban diseñando y construyendo mucho más que solo cuatro paredes y un techo, estaban creando hogares, diseñando para familias. Durante los años siguientes trabajaron únicamente en la creación de hogares dentro de la región de Barahona, llegando rápidamente a más de 25 hogares en menos de 2 años. En 2015 decidieron comenzar a trabajar dentro de una nueva comunidad llamada Milton. Esta comunidad estaba lejos de los Bateyes pero cerca de su hogar en Barahona. La necesidad en esta comunidad era abrumadora, pero creían que podían continuar con su trabajo y construir hogares para las muchas familias que lo necesitaban desesperadamente. Al construir su primera casa en esta comunidad, lo que descubrieron estaba lejos de ser la creación de una casa, pero los niños traficados por su padre.
Por esa misma razón, los fundadores de BRP decidieron tratar de encontrar una solución para ayudar a estas jóvenes, pero lo que descubrieron fueron las terribles estadísticas de un país que carecía de todos los recursos que las víctimas necesitaban. Las víctimas y los casos estaban en todas partes, pero ninguna organización estaba abordando el tema de la trata de personas y la violencia doméstica en estas comunidades. Durante los siguientes dos años dejó de funcionar para centrarse exclusivamente en ayudar a las innumerables mujeres y niños que fueron víctimas de estos crímenes horribles.
¿Cómo podríamos simplemente continuar construyendo casas y pretender que no fuimos testigos de estos crímenes humanitarios? Ese día tomé una decisión que simplemente no podíamos esperar, pero nuestro trabajo no había terminado, en realidad solo había comenzado. No teníamos idea de lo que estábamos haciendo, pero lo descubrimos en el camino. En lo que se convirtió BRP fue algo que nunca imaginé posible.
Katie Godkin Morales, Fundadora
Nuestra solución fue romper el ciclo de pobreza intergeneracional, dos generaciones a la vez. Para hacerlo, tuvimos que concentrarnos en desarrollar un programa que facilitara una respuesta completamente holística para rehabilitar las vidas de estas mujeres y niños. Desde refugio, educación, salud e higiene, empleo y seguridad, hemos podido empoderar a estas mujeres y niños en un programa que no solo brindó libertad, luchó por la justicia, sino que simplemente los amó todos los días. A medida que continuamos con nuestra nueva misión, avanzamos hacia un futuro que brinda atención holística sostenible a mujeres y niños en la República Dominicana.
Gracias a todos los que me ayudaron con una donación o una palabra de apoyo. El trabajo realizado durante el viaje fue una bendición para toda la comunidad. En cuestión de 5 días construimos una cocina comunitaria para la aldea Los Robles en Barahona, RD. Imagínense, una cocina de 12 x 12 pies para el uso de aproximadamente 200 personas - y gozaban de alegría. Si todos nos detenemos por un momento y vemos a nuestro alrededor nos daríamos cuenta lo poco que ayudamos a los demás. Te aseguro que tus problemas de hoy no son tan graves si tan solo vivieras un dia en los zapatos de otro.
Stephany Knize, voluntaria